Equinoterapia en el Gil Letelier, otro servicio a la comunidad

Un convenio entre la Municipalidad de Santiago, el Club del Rodeo Chileno Gil Letelier y la agrupación Kawell Wenüy, ha permitido que en las instalaciones del Club se estén realizando clases de Equinoterapia. Esta iniciativa constituye un nuevo servicio a la comunidad y también una oportunidad para demostrar las cualidades de ese noble ejemplar que es el Caballo.

Marlene Vigneaux es la encargada de comandar un grupo multidisciplinario de profesionales que están haciendo estas sesiones y fue quien explicó los detalles de este acuerdo a Caballoyrodeo.cl y nos dio detalles de este trabajo comenzado en las instalaciones de Avenida Carlos Valdovinos 2951.

"Nosotros somos un ente privado que se llama Kawell Wenüy (caballo amigo en mapudungun). Yo soy equinoterapeuta, estudiante de Medicina Veterinaria. Mi socia es fonoaudióloga, también equinoterapeuta y pensamos en la necesidad de los vecinos de Santiago ya  que otros centros que hacen hipoterapia, que es muy distinto a lo que hacemos nosotros, estaban muy retirados", aseveró.

"Conversamos con los amigos del Club Gil Letelier, que también estaban interesados en tener este tipo de terapias acá en Santiago. Se lo presentamos al alcalde Felipe Alessandri, quien nos dio el sí y que estaban felices de cooperar. Así que firmamos un convenio para atender a personas con distintos tipo de discapacidad, los que vienen acá al Club para hacer las sesiones", informó.

"En este momento estamos atendiendo a 8 pacientes, que vienen directamente por el convenio con la Municipalidad de Santiago. Tenemos desde los tres años hasta los 37 años Y por supuesto la idea es que acá tengamos un servicio a la comunidad y que no sea solamente por el convenio con la Municipalidad de Santiago, sino que también vengan de otras comunas, que puedan acceder a este tipo de terapias", añadió.

Respecto de la forma en que desarrollan su de trabajo, explicó: "Primero, los caballos que estamos usando son caballos de raza chilena, pero se pueden usar de cualquier tipo de raza para lo que es equinoterapia. Sí necesitamos que sea un caballo de un carácter muy especial. Una cosa es que sea manso y otra cosa que tolere descompensaciones de los pacientes, como los chiquititos con autismo. Sus descompensaciones son grandes; patean, pegan tirones, muerden y de repente pasa que nosotros estamos dando instrucciones y el chiquitito se descompensa y puede pegar un tirón arriba del caballo, así que el caballo tiene que ser casi operado de los nervios".

Reiteró que, por lo mismo, deben ser ejemplares muy especiales, muy mansos, muy dóciles y los que están usando son caballos que alojan en el Club capitalino.

"Nosotros empezamos con las sesiones en mayo y son tres veces a la semana. El miércoles y sábado son jornadas completas, a partir de las diez de la mañana  hasta las cinco de la tarde. Y los viernes estamos en la tarde, a partir de las dos de la tarde. Los padres de los niños interesados en asistir a estas sesiones tienen que venir directamente acá los días miércoles, viernes o sábado o comunicarse directamente a través de la página nuestra que tenemos en Facebook (Kawell Wenüy), donde está todos los datos necesarios para inscribirse y la información requerida", sostuvo.

Aprovechó, además, para efectuar una distinción entre Equinoterapia e Hipoterapia, sosteniendo: "Equinoterapia es todo. Es decir, nosotros vemos toda la parte de rehabilitación, habilitación tanto en la parte de educación, salud, mental, deporte. E Hipoterapia es parte de la Equinoterapia y se dedica más a la parte kinésica,  a la parte motora. A diferencia de la Equinoterapia, donde usted tiene de todo. Tiene hipoterapia, tiene equitación adaptada y equitaciones terapéuticas. Allí podemos trabajar en educación, la parte mental, reparaciones, inserciones. O sea, personas que hayan estado privadas de libertad. Reeducarlas y poder habilitarlas para que puedan ser nuevamente reinsertadas en la sociedad".

Informó, asimismo, que en agosto estaría concretándose un proyecto para trabajar con adultos mayores, también con un equipo multidisciplinario, especificando que en las sesiones en el Gil Letelier trabajan seis profesionales y que también colaboran voluntarios egresados o ya titulados de las distintas carreras del área, como Sicología, Kinesiología, Terapia Ocupacional, Fonoaudiología o Medicina Veterinaria.