Iván Ortiz: En el Criadero Gallipavo continuamos con nuestro proyecto a largo plazo

Ubicado en la zona de Bulnes (Octava Región), el Criadero Gallipavo es uno de los planteles donde la crianza es prácticamente una forma de vida. Allí, Iván Ortiz Adet junto a su padre Iván Ortiz Fuentealba (a quien llama cariñosamente el patrón), van cumpliendo paso a paso las distintas fases de un proyecto a largo plazo. En diálogo con Caballoyrodeo.cl, el joven criador habló de cómo han vivido esta situación generada por el Covid-19 y cuál ha sido el trabajo que ha ido desarrollando junto a su progenitor en la actualidad.

"Bulnes ha estado bien vapuleado por el Covid, pero como el Criadero está ubicado más en la parte rural, no es tanto tema. Hemos tratado de controlar bastante lo que son los accesos y cuidarnos, aplicando todas las medidas que ya todos saben. Nosotros vivimos en Santiago, pero vamos periódicamente al campo; mi papá casi todas las semanas. Obviamente no nos hemos podido juntarnos mucho, así que hemos estado bien encerrados y dedicado a trabajar", informó.

"Pero cabe reiterar que, como todos, nos hemos estado cuidando mucho; eso es lo primero. Cuidando también a la gente que trabaja con nosotros en el Criadero y obviamente el que no haya rodeos ni competencias, a uno le da más calma para poder tomar decisiones que permitan en cierta forma hacer las cosas más tranquilos. Privilegiar el trabajo de los caballos nuevos y no hacerlo tan apurado como cuando hay rodeos los fines de semana. Eso a veces hace tomar decisiones en función de competir", manifestó.

"Pero en general ha estado todo tranquilo; hemos estado trabajando muchos caballos nuevos; De hecho, ahora ya estamos trabajando puros caballos criados, que están desde amansa hasta corridos en la casa. Entonces, hemos estado dedicándoles más tiempo a eso, con calma y súper tranquilos", apuntó.

Hablando de reproducción en el Criadero Gallipavo, señaló: "Nosotros en las dos últimas temporadas estuvimos reproduciendo al Reumén, un hijo del Requinto que nos prestó el Criadero Peleco. Lamentablemente el potro falleció el año antepasado y eso nos obligó a salir a buscar otro potro para poder continuar.  Ahí pudimos adquirir al Lindo Amigo (N° 160626), que es uno de los pocos hijos del Morcacho que van quedando. Después, en una segunda pata, adquirimos al Sacristán (N° 220575), que es un hijo del Satanás, que también lo estamos perfilando como reproductor más a largo plazo, ya que es más nuevo".

Sacristán

"Así que en eso hemos estado, no reformulando, sino dando el paso a una siguiente etapa en el Criadero, aprovechando la pandemia, la calma para poder tomar decisiones", expresó, agregando sobre la participación del Criadero en el Rodeo: "La temporada pasada estuvimos corriendo con Feña Guzmán una collera, con la cual logramos algunas figuraciones, pero no nos alcanzó para completar para los Clasificatorios".

En cuanto a las exposiciones, otra área en que participan y la posible presencia en la Exposición Nacional Especial con algún ejemplar, indicó: "Por el tema de la pandemia, a la potranca (Gallipavo La Cava), que ya llevamos dos años clasificando a la Final Nacional, aprovechamos de amansarla y ponerle potro, pensando que no se iba a hacer exposiciones. Entonces, no clasificamos nada ni tampoco postulamos con nada por la incertidumbre que significa estar en pandemia. No sabemos qué va a pasar, pero en todo caso me parece muy buena idea que la Exposición Nacional se haga cuando se pueda".

Al preguntarle cómo ven tanto él como su padre el panorama hacia adelante, considerando especialmente la suspensión de las actividades deportivas hasta marzo, respondió: "Nosotros hemos estado con el mismo equipo de trabajo y siguiendo lo que teníamos planificado. Sí dándole más énfasis al tema de probar caballos nuevos, sacarlos, darles su tiempo, trabajarlos. Y con respecto al tema crianza, yo creo que no tiene muchos cambios, porque los criaderos en general se mueven en un ambiente rural en donde el Covid por suerte ha permeado menos. Entonces, toda esa parte se mantiene más o menos igual. En donde tiene más impacto es en la parte más competitiva de los criaderos".

"En el caso nuestro tampoco es tanto, porque estamos más preocupados del proyecto más a largo plazo y avanzando. Esto de criar es súper largo y súper incierto. Por lo tanto, uno tiene que ir dando pasitos de a poco, pero no parar de dar pasos. El proyecto nuestro siempre ha sido tener una propuesta un poco distinta a lo que se acostumbra. Básicamente, primero, tener caballos que sean competitivos en las manos de uno, que es algo no tan fácil de lograr. Segundo, eso requiere hacer mezclas de sangres y buscar reproductores que se avengan a las condiciones que uno cree que tiene como jinete, también qué le falta y también al sistema de trabajo que nosotros tenemos", expuso.

Lindo Amigo

"Nosotros venimos trabajando hace diez años un sistema de crianza y forma de trabajar los caballos y en función de eso seleccionar. Entonces, la verdad que es tener un Criadero con una identidad, donde uno reconozca desde lejos los caballos que son de nuestra crianza. Estamos acostumbrados a tener caballos que sea bonitos, de buena boca; que sirvan para la Rienda, que sirvan para el Rodeo. Es un proyecto ambicioso, pero si uno lo hace a la escala propia, bien asesorado, en algún minuto tendrán que llegar los resultados", aseveró.

"Por suerte, con El Cato, que fue el potro con el cual partimos, logramos dejar varias hembras suyas, las que son súper reconocibles. Se caracterizan mucho por ser bien bonitas, de muy buenos adornos, algo que a El Cato siempre se le criticó fue el tema de la alzada, pero nosotros tenemos caballos muchos más grandes que el potro. Entonces, hemos ido logrando hacer mejoras y siempre con el mismo equipo para no desviarnos del objetivo", enfatizó.

Finalmente, nos dijo: "O sea, yo no sé si habrá muchos criaderos que puedan tener la suerte de contar con Jaime Poblete, quien ha estado desde el principio del Criadero y es un maestro en el tema de la Rienda y en el de la crianza. Tener también al "Toto" Cortina, quien es un maestro como jinete. Esas cosas uno las disfruta mucho; agradezco la oportunidad de poder conversar con ellos y que sean también parte del proyecto. Eso siempre es un agrado y es una suerte".