Sobre obesidad en equinos y genética se profundizó en el Consejo Técnico de los Criadores

La opinión general fue que el Consejo Técnico de la Federación Criadores de Caballos Raza Chilena tocó temas muy interesantes y valiosos, por lo que "Raza Chilena" quiso profundizar en los mismos y para ello fueron invitados dos de los expositores de la jornada, Marianne Werner y Hedie Bustamante, profesionales de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Austral de Chile.

La doctora Werner dictó la charla "Obesidad y Sobrepeso en Equinos: ¿Por qué debemos preocuparnos?", la cual generó muchas consultas de los presentes en Nevados de Chillán.

"A mí me dio alegría cuando Gabriel Varela me comentó el tema, que fue por solicitud de don Gonzalo Cardemil, porque es un tema que no es sencillo en general. No es fácil de abordar sin herir susceptibilidades, porque los criadores tienen una visión de cómo sus caballos se ven bien y tiende a pasar muchas veces que la visión del criador es distinta a la visión de lo más saludable. Pero sentí que hubo una muy buena recepción de los asistentes, hubo muchas preguntas, y en ese sentido quedé bastante conforme", expresó.

"Es un tema que es importante instalar, no ocurre solamente en esta raza ni sólo en nuestro país; es un problema a nivel mundial que se está tratando de instalar de distintas formas, porque finalmente lo que todos queremos es que los caballos estén sanos y en buenas condiciones, y el sobrepeso y la obesidad atentan justamente contra eso, terminamos con distintas patologías, animales enfermos, incluso en algunas ocasiones teniendo que eutanasiar a ese animal. Creo que estamos en un buen pie y en un buen momento de abordar este tema", agregó.

Sobre la positiva recepción, dijo que "me sentí tranquila y hubo muchos comentarios, hartas preguntas. De hecho, los 20 minutos que había que usar se multiplicaron por tres, pero eso indica que efectivamente había interés de los asistentes y eso me deja muy contenta, porque abre una ventana de un tema complicado, que esperamos no se cierre".

El director de la Federación de Criadores José Luis Pinochet, presidente de la Comisión Técnica, se refirió al tema de la obesidad en los equinos, apuntando a lo que ocurre en las exposiciones, algo que también se tocó en el Consejo Superior.

"Yo hice mi mea culpa con respecto a los jurados, porque los jurados de exposición hemos tolerado por mucho tiempo caballos gordos. Los excesivamente gordos siempre los hemos castigado desde hace varios años, pero los gordos no. Y ahora tenemos que inculcarles a los criadores que no pueden llegar con ese nivel de gordura, porque van a quedar más atrás en la fila de la exposición. Ya nos vamos a reunir pronto con el Cuerpo de Jurados para ver ese y otros temas, pero ése es uno de los más importantes", argumentó.

El director Juan Carlos Pérez, también presente en "Raza Chilena", comentó al respecto que "hace tiempo los jurados vienen haciendo comentarios y siendo más estrictos en la evaluación de un caballo que está muy gordo y se ha ido mejorando, pero no lo necesario. Esto nos viene a hacer conciencia a los criadores que estamos cometiendo errores muchas veces garrafales. Como decía Marianne a nosotros nos gustan los caballos más redonditos y muchas veces nos pasamos dando demasiado alimento a los caballos y además gastando más de lo que se debe gastar, por desconocer del tema. Así es que lo encuentro espectacular y cómo los temas se han ido implantando en los Consejos, se ha ido sembrando la semilla, creando la conciencia y poco a poco se han ido haciendo las cosas".

Otro tema muy interesante cautivó a los criadores

Tan interesante como el tema anterior, fue el que expuso el doctor Hedie Bustamante en su charla "Evaluando la diversidad genética de la Raza Chilena a través del ADN", trabajo que siguió la línea de investigación iniciada por el doctor Phillip Sponenberg.

"Es la continuación de un trabajo que habíamos partido el 2018. Me acuerdo cuando conversamos con la Federación de traer alguien que nos pudiera guiar en el tema genético, porque había harta preocupación en los criadores en relación con la endogamia existente en la raza, que estábamos muy cerrados, utilizando demasiado ciertas líneas de sangre y que se iban perdiendo otras líneas que potencialmente podían ser interesantes de recuperar", explicó Bustamante.

"El 2019 en el Consultivo de Villarrica hicimos una presentación preliminar en ese momento a través de una metodología más tradicional para evaluar la consanguinidad en una raza, a través de los registros genealógicos, utilizando el pedigrí. Y en esta oportunidad, después de dos años, subimos un poquito la apuesta y dijimos vamos a qué pasa a nivel de los exámenes de paternidad y por eso la clasificación de la paternidad se hace a través de lo que se denominan marcadores moleculares o microsatélites, que son secuencias de genes específicas que nos permiten decir éste es el padre y ésta es la madre de un producto. Esos resultados y datos se pueden utilizar para hacer exámenes de genética poblacional y fue lo que demostramos", continuó.

"Fue un desafío para mí, no tanto el análisis de cinco mil y tantos caballos, sino que estuve muchas horas pensando como poder presentarlo de una forma que no fuera compleja de entender, porque efectivamente es un tema que puede ser bastante árido para las personas que no lo dominan. Lo tratamos de presentar de una forma muy lúdica y destacando ciertas cosas, porque el 2019 nos habíamos ido tristes, le comentaba a la gente, porque la consanguinidad a partir de los pedigrís en ese momento había subido de 2 a casi 4,6 por ciento, se había duplicado en los últimos 20 años, y ahora cuando vamos a ver esa consanguinidad molecular, por decirlo de alguna forma, nos damos cuenta de que todavía es menos de 2 por ciento", agregó.

"Lo cual es esperable, porque cuando uno hace el análisis de pedigrí, el análisis es muy estructurado, muy matemático, y no toma en consideración la diversidad genética que existe en una población; y eso fue lo que tratamos de representar. Y cuando metemos la diversidad genética dentro del análisis, nos damos cuenta de que la consanguinidad es menor a lo que teníamos esperado. Ahora éstas no son noticias para que nos relajemos, sino que estos resultados hay que tomarlos con mucha tranquilidad e ir avanzando en una línea estratégica de desarrollo de hacia dónde quiere la Federación avanzar con estos temas y ahí planteamos algunas ideas que fueron muy comentadas y discutidas en el Consejo Técnico", completó.

Sobre lo expuesto por el doctor Bustamante se pronunció José Luis Pinochet en "Raza Chilena".

"Sin duda los criadores entendieron un poquito más del problema, aunque el hecho de que Hedie nos comentara ahí que en esta muestra actual de más de 5 mil caballos apareció de nuevo que es poco menos del 2 por ciento esa consanguinidad, yo no quedaría tranquilo porque esa muestra incluyó mil caballos de Coyhaique y un poco menos de la Asogama, y puede que allá tengan mucha más diversidad de la que hay en la zona central. Entonces una vez que tengamos el análisis de unos 5 mil también de la SNA o la SOFO, me voy a quedar un poco más tranquilo si todavía anda cerca del 2 por ciento. Pero creo que volverá a subir al 3 y tanto o quizás 4. El tema es muy preocupante y apasionante, porque podemos llegar a saber mucho más del caballo chileno y de nuestra raza pudiendo analizar a ese nivel molecular. Así es que es magnífico que puedan hacerlo", señaló.

Hedie Bustamante respondió que "estamos en eso, lo conversamos largamente en el Consejo, que una de las líneas estratégicas que debiera tomar la Federación es mejorar la calidad de los registros de paternidad, porque hoy le llegan al criador, al ente registrador, pero debiera haber una base de datos centralizada. Como yo tengo todos los modelos estadísticos ya metidos en el sistema, uno simplemente podría ir cargando resultados de animales semestralmente y podríamos tener trimestral, semestral y anualmente un nuevo valor si quisiéramos. Y también podríamos seleccionar animales que son más diversos o que son genéticamente más distantes unos de otros, lo cual nos permitiría ver dónde están y también a partir de eso generar estrategias de conservación de esas líneas, en el caso por supuesto que la Federación y los propietarios así quieran".

"Pero este es un trabajo súper dinámico, que lo partimos con esos 5 mil. Como lo dije en el Consultivo, no es un trabajo que haga yo; son mis estudiantes y aprovecho de enviar un agradecimiento cordial a Carla Bustos, hija del criador Leonardo Bustos de Coyhaique, del Criadero Los Colonos. Ella es la que tomó este tema hace un par de años y ha estado metiendo los resultados de los exámenes de paternidad en planillas separadas, después cambiando las letras por números, metiendo los números con códigos en unos softwares de análisis estadísticos, que permiten que uno después se luzca, entre comillas, en un Consultivo, pero todo el trabajo es de ellos", enfatizó.

"Es un desafío permanente poder llegar a incluir, como dice don José Luis, los de SOFO, de la SNA, y además incluir un número estandarizado de animales por década probablemente, que sería un próximo desafío; un número estandarizado de cada uno de los entes registradores por década, para ir viendo además la consanguinidad molecular a través de los años. Y con ese desafío yo creo que ya hay suficiente material para poder proyectarse", redondeó.

Pero, además, el doctor Bustamante planteó en el Consejo la idea de estudiar el genoma del caballo chileno en mayor profundidad, con análisis que se realizan en Estados Unidos.

"Probablemente todos se acuerdan de a fines de los '90, comienzos del 2000 cuando se logró tipificar, genotipificar y hacer la secuenciación génica del genoma del ser humano completo, que fue una tremenda noticia a nivel internacional. El año 2006 el genoma del caballo también cumplió el propósito de estar secuenciado completo, es decir, saber exactamente las secuencias génicas, donde están, en qué cromosomas. Y hoy existe tecnología que nos permite tomar ciertas estructuras de ciertos animales y colocarlas en gen-chips, que permiten hacer cruzas y ver en qué caballos qué secuencias génicas están, voy a ocupar un concepto coloquial, 'prendidas' versus otras que están 'apagadas'", explicó.

"Eso después uno lo puede analizar muy en profundidad en 170 mil, 500 mil, dos millones de secuencias génicas, si uno quisiera, y definir por ejemplo en el caballo chileno qué secuencias génicas están funcionalmente activas, en qué cromosomas, en qué lugar. Ese es un sueño maravilloso para la raza y para los criadores, decir qué cosas estás codificando para la selección genética que hemos hecho por tantos años. Ese es un tremendo desafío, esa tecnología existe hoy y está disponible comercialmente para poder avanzar hacia eso y a lo mejor encontrar incluso diferencias dentro de poblaciones en nuestro mismo país, diferencias sutiles, algunos caballos que tengan ciertos genes prendidos, otros que tengan ciertos genes apagados y que hacen que las diferencias entre la misma raza, manteniendo un tremendo estándar, existan", agregó.

Bustamante señaló el costo es de entre 150 y 180 dólares por muestra de genotipificación y que hay empresas especializadas que lo hacen muy frecuentemente.

En el Consejo se manifestó el interés por realizar estos estudios y ya existe un ofrecimiento de Roberto Standen, presidente de la Asociación Malleco y dueño del Criadero Santa Ana, de aportar los recursos para efectuarlos.