Secretos del Arreglo, Alberto Hermosilla: "Es un proceso en el que hay que tener paciencia"
Alberto Hermosilla, Mejor Arreglador de la Asociación Melipilla de la Temporada 2021-2022 por su labor en el Criadero Los Tacos de Rumai, conversó con Caballoyrodeo.cl en la sección "Secretos del Arreglo", comentando su forma de trabajo, de quién aprendió este oficio, las herramientas que utiliza y aconsejando a los más jóvenes que comienzan a emprender el importante camino del desarrollo de los caballos.
- ¿Desde cuándo se dedica a este oficio?
"Me dedico hace unos 10 años profesionalmente, pero desde chico toda la vida he estado en lo de los caballos, aprendiendo, trabajando, todos los veranos. Aprendiendo de mi hermano y mi papá, que siempre los tuve presentes desde chico. Pero profesionalmente llevo unos nueve o 10 años"
- ¿Tú papá y tu hermano fueron los profes?
"Sí. Uno después va aprendiendo mirando a algunas personas, pero mi base siempre fueron mi papá Patricio Hermosilla y mi hermano Cristián Hermosilla".
- Actualmente trabajas en Los Tacos de Rumai…
"Yo estoy hace casi siete años en Los Tacos de Rumai. Empiezo acá la mayoría de los caballos nuevos. Los tomo de la amansa, los trabajo, se corren en la casa y se paran. Después van a un descanso y luego los toma mi hermano, quien los pone a punto y los saca a correr. Esa es la dinámica que hay acá en el criadero".
- ¿Qué te parece los resultados que ha obtenido el criadero, sobre todo en la última temporada?
"Espectacular. Una de las claves es el trabajo en equipo que se hace acá. El amansador, después vienen los arregladores, luego Cristián con Francisco los ponen a punto y los corren muy bien los dos. Los patrones también, que son muy importantes. Creo que se está viendo el trabajo que se hace día a día hace bastante tiempo".
- ¿Qué te parece tu primo como Mejor Arreglador?
"Es muy bonito, no lo esperaba. Es un incentivo para uno que de repente trabaja más desde el anonimato, que reconozcan el trabajo que uno ha hecho durante varios años y que ahora se ha visto reflejado con estos logros. Me pone muy contento".
- ¿Cómo empiezas los caballos nuevos?
"Acá lo que se hace es que el amansador, Javier Ayala, los tiene aproximadamente durante tres meses. De repente un caballo puede demorarse más o menos, dependiendo del temperamento del caballo. En promedio son tres meses. De ahí los tomo yo y los empiezo a troyar con una guatanita, harto tiempo. Después el mismo caballo va diciendo lo que hay que hacerle, no es una cuestión sistemática, desde mi punto de vista. El caballo va diciendo lo que hay que hacerle. Siempre tiene que ser con paciencia y con guatana, y se le va pidiendo al caballo a medida que este va dando, va subiendo escalones. Después se le presenta el toro, se le echa una corridita suavecita y se suelta a descanso.
Después, dependiendo de cómo van los caballos, lo toma uno o la persona que los va a correr para ponerlo a punto, en este caso mi hermano, y salen a correr. Eso es lo que se hace en el criadero. Es el proceso de forma bien abreviada, porque los caballos van cambiando y son todos distintos, pero a grandes rasgos ese es el proceso que se hace acá".
- ¿Cuál es tu herramienta favorita para la boca?
"Para empezar un caballo sí o sí guatana, porque si uno le pone un riendero o algo que a sujete mucho, el caballo lo va a rechazar y no aceptará la boca. Primero que todo tiene aceptar la boca, que uno los pueda tomar de la boca, y para eso se debe ocupar una guatana. Una guatana muy suave, de suela o de soga, por lo menos un mes desde que se toma de la amansa. Después el caballo va pidiendo, puede ser un ocho, un ochito, o un filete, cosas así. Porque la boca es lo más importante creo yo".
- ¿Qué ejercicios realizas?
"Lo primero que yo busco es que uno desde que uno lo monta esté bien. Que esté mansito para montarlo y que camine bien, que no camine nervioso, que no camine para todos lados, que camine derechito en un eje, tranco a tranco, eso es muy importante. Si el caballo no está terminado bien, no llevarlo al picadero, hasta que aprenda a caminar bien, tomadito de la boca y tranquilo. Después cuando uno lo meta en la medialuna o en el picadero, que el caballo haga todo bien, que haga la troya derechito así no más. Se le hace la troya, que aprenda a parar y volver, ahí uno le empieza a pedir más. Cuando esté galopeando aplomadito, en el suelo, uno le va pidiendo más postura. Primero al tranco, después al trote y al galope.
Luego se le echa arriba al toro, pero ese también es un proceso en el cual hay que tener cuidado, no apurarse. Si uno quiere que el caballo parta al tiro arrastrando, el caballo puede rechazar. La idea es que no rechace, que siempre le quede gustando el toro. Porque el caballo puede estar muy bien en la postura, rápido, pero si uno se apuró en el toro, el caballo lo va a rechazar y después cuesta mucho volver atrás. Es un proceso lento, en que se vaya apoyando el caballo, siempre apoyadito. Es un proceso en el que hay que tener paciencia".
- ¿Algún arreglador que usted admire o destaque?
"Como se dice, desde la televisión o la pantalla, me gustan don 'Lalo' Tamayo y don Mario Tamayo, a ellos dos siempre los vi siempre. Y desde lo personal, admiro mucho a mi papá y a mi hermano, siempre los miré y aprendí de ellos, siempre aprendí de ellos y lo sigo haciendo".
- ¿Qué le aconseja usted a los más jóvenes?
"Que el que arregle caballos lo haga porque le gusta arreglar, que le guste que el caballo quede arreglado, no por pensar en ir a correrlo. Que lo haga porque le guste que el caballo quede arreglado. Porque en la actualidad uno ve que es gente que le gusta correr y de repente por esos apuros los caballos quedan malos y no duran nada. Así que quien quiera aprender de arreglo que sepa que para esto se necesita paciencia y es un trabajo largo, no es de la noche a la mañana. Ese es un consejo importante. Hay que tener paciencia y el mismo trabajo día a día enseña. En el trabajo diario va aprendiendo. Uno mira, a uno le enseñan, le corrigen, pero lo que más enseña es el trabajo diario de cada uno. El esfuerzo que uno le pone día a día en algún momento da frutos. Eso es lo que me ha pasado en mi experiencia y lo que he vivido. Si uno le pone empeño y esfuerzo, las cosas resultan".