En memoria de Rodrigo González y Carola Calleja: Nos comprometemos a honrar su legado

Este martes en la Plaza de Los Héroes de Rancagua se efectuó un acto convocado por la Federación de Agricultores de O'Higgins -Agro O'Higgins- denominado "encuentro por la crisis de seguridad". En la oportuniodad fue leída una carta de la Federación de Rodeo Chileno en memoria de Rodrigo González y Carola Calleja (QEPD).

Esta es la carta leída:

En nombre de la Federación de Rodeo Chileno y del mundo rural, hoy nos reunimos para rendir homenaje a Rodrigo y Carola, quienes fueron trágicamente arrebatados de nuestras vidas.

Recordamos a Rodrigo, un apasionado del campo y el rodeo, cuyo amor por nuestras tradiciones y su compromiso como dirigente dejaron una huella profunda en todo el mundo huaso. Su dedicación y amor por los caballos, la crianza, el detalle de sus sangres, recordar sus actuaciones deportivas y anécdotas varias, fueron tema de discusión eterna con quienes compartimos esta pasión. Destacado criador de caballos chilenos, en su querido criadero La Rosa, Rodrigo trabajó incansablemente para preservar y promover las mejores genéticas en su criadero, manteniendo el legado que le dejaran sus padres y abuelos, tarea que sin duda alguna, seguirán su querido hijo Guata y su hermano Sebastián.

Recordar además, su desinteresada colaboración en los encuentros internacionales criollos, que fueron un testimonio de su generosidad y compromiso con el bienestar de la comunidad. Con su esfuerzo, ayudó a recaudar fondos para el Pequeño Cottolengo, brindando un apoyo invaluable a aquellos que más lo necesitaban.

No puedo dejar de mencionar su último emprendimiento "Rodeo Soluciones Integrales”, tan solo hace unos pocos días atrás habíamos estado conversado acerca de lo oportuno y el excelente nicho que se había ganado con su empresa, haciéndole honor al nombre de soluciones integrales, transformándose de esta manera en una excelente alternativa para el mundo corralero. Rodrigo a través de “Rodeo Soluciones Integrales”, le permitió a muchos huasos, arregladores, petiseros, transportistas, artesanos, veterinarios entre otros, acceder a oportunidades laborales, asegurándose así de que otros pudieran encontrar su camino y prosperar.

Junto a él, Carola fue una madre excepcional, no solo para sus propios hijos, Rosario y Guata, sino también para muchos alumnos en la comunidad escolar que tuvieron la suerte de cruzarse en su camino. Con su calidez y amor, se convirtió en una madre sustituta que ofrecía apoyo, comprensión y guía a aquellos que más lo necesitaban. Su vocación docente iba más allá de la sala de clases; ella cultivó un ambiente de confianza y cercanía donde cada niño se sentía valorado y querido.

Hoy, honramos no solo su memoria, sino también la labor invaluable que realizaron como pareja. Los valores que compartieron y el amor que irradiaron, impactaron profundamente las vidas de Rosario, Guata y de todos los que los conocimos.

Hacemos un llamado urgente a las autoridades y a la clase política: no podemos permitir que la violencia siga saqueando nuestras comunidades. No se trata de andar llorando, Ustedes están en sus cargos porque nosotros los elegimos y por ende les exigimos que hagan su trabajo mediante acciones concretas y eficaces para garantizar la seguridad de nuestras familias. Este nivel de violencia debe terminar de una vez por todas se lo debemos a nuestros hijos y a nuestros nietos. Chile debe volver a ser un lugar donde el amor y la paz reinen, y donde seres humanos como Rodrigo y Carola nunca más sean víctimas de la violencia.

A Rosario y Guata, les aseguramos que no estarán solos. Nosotros nos encargaremos de apoyarlos y cuidar de ustedes, garantizando que el amor y las enseñanzas de sus padres perduren en sus corazones.

Que la memoria de Rodrigo y Carola nos inspire en la lucha por un futuro más seguro y lleno de amor. Hoy, más que nunca, nos comprometemos a seguir sus pasos y a honrar su legado.

Descansen en paz, Rodrigo y Carola. Siempre vivirán en nuestros corazones.