Enrique Gutiérrez recibió un emotivo homenaje del Club Yerbas Buenas
Por Rodeolinares.cl y Alejandro Alegría T.
La verdad es que todos los homenajes y reconocimientos no son suficientes cuando se trata de engrandecer a una leyenda del periodismo corralero. No hay suficientes palabras para poder enaltecer a un profesional con entrega, carisma, conocimiento, humildad y camarada de las tradiciones.
Hablamos del "profe" -como lo dicen algunos-, Enrique Gutiérrez. Un señor de las letras corraleras y en las quinchas de gran parte del país, que con su voz, sus fotos y sus notas deportivas ha dado a conocer lo maravilloso y apasionante del rodeo chileno en numerosos medios de comunicación, incluyendo los más importantes de Chile.
El profesor y periodista de profesión, DON Enrique Gutiérrez ha visto crecer a generaciones de familias corraleras, y a sus actuales 80 años ha cubierto por décadas el Champion de Chile y ha visto a numerosos Campeones desfilar frente a sus ojos mientras relata para medios informativos.
Por ser un aporte al rodeo y por la gran trayectoria huasa, que si bien no viste de mantas, lleva las tradiciones con su propia vida, es el reconocimiento que el club Yerbas Buenas hizo a don Enrique, y que creemos, representó a numerosas familias corraleras el agradecimiento a su servicio como periodista de rodeo.
Revive el homenaje a continuación:
La alegría de Enrique Gutiérrez
Enrique Gutiérrez comentó a Caballoyrodeo.cl esta bonita sorpresa que recibió: "Fue algo sorpresivo y como todas las cosas que son sorpresivas, lo encontré muy emotivo, realmente un gesto muy cariñoso. Esto habla del cariño de la gente del rodeo, porque la gente del rodeo es así. En este orden de cosas para uno es más sorpresivo todavía, porque dentro de mí andar, yo soy por naturaleza profesor, eso estudié y eso quise hacer, y el profesor no está en búsqueda de merecimiento o cosas por el estilo. Uno se satisface, alegra y solaza por el éxito de sus alumnos".
"Uno disfruta del éxito de los alumnos, eso es histórico y no es para nade un misterio. Y como dijo un filósofo alguna vez 'desconfía de tu profesor porque él aprende enseñándote a ti'. Esa es la verdad, porque uno se alegra mucho de los éxitos de los niños que vio crecer, que tuvo de pequeño y que van creciendo. Si uno abrazo la profesión desde ese ángulo, disfruta con el éxito de sus alumnos y no vive a la siga de premios", agregó.
Continuó diciendo: "He tenido la fortuna de que me han llegado premios y reconocimientos. Cuando llegan uno le da el doble del significado que aquel que anda a las siga de los premios. Lo mismo pasa con el rodeo, nunca he estado en busca de premios, esto lo hago por convicción, porque me gusta, porque todavía quiero seguir viendo los rodeos. Nunca he dejado de ir a un rodeo de Talca o de Linares".
"Para mí fue muy sorpresivo, tanto que me quedé para dentro. Lo lógico debió haber sido haber agradecido en la medialuna de Yerbas Buenas. Recibí muchos gritos y palabras de aliento de amigos que me gritaron 'Don Enrique' o 'Profe', les reconocí la voz, todavía hay alumnos y gente que me dice así. Fue bonito, un momento muy emotivo", añadió.
Gutiérrez también señaló que: "Después esto se prolongó en una mesa acompañado por amigos, entre ellos Alberto Riquelme. Personalmente estoy convencido de que fue Alberto quien inventó todo este cuento, porque lo usaron como anzuelo para que me invitara a almorzar. Cuando me preguntaron en Talca si iba a ir al rodeo, dije que no porque estaba invitado por Alberto a almorzar con su familia. Almorcé con su familia, pero había otros invitados y después cuando iba a empezar la serie, quise ir a buscar y me dijo 'para qué iba a buscar cámara'. Ahí me puse cachudo, lo tuvieron muy en secreto y eso lo hizo más sorpresivo".
"Con Alberto Riquelme hay más de 40 años de amistad, a Oscar Bonilla lo conocí cuando él tenía 15 o 16 años y llegó a Linares, y otros personajes de acá que se han ido sumando a la historia y que estaban ahí. Fue bonito recibir este homenaje entre tanta gente. También saludé a algunos niños que llegaron a darme un abrazo, como Fernando Riquelme Cortés, que es el hijo mayor de mi recordado amigo Juanito Riquelme, que se nos fue hace casi seis años, con quien he hecho una gran amistad y que sabe que yo quería mucho a su padre, como él a mí. Uno ve cosas bonitas y todo va sumando", se extendió.
Por último, declaro muy agradecido del deporte nacional: "El rodeo es eso, una familia inmensamente grande, que es cariñosa. No estoy arrepentido nunca de haber dejado la docencia para haberme quedado solo con el periodismo y cuando no pude hacer periodismo amplio en radio o diarios, quedó esto de estar hace 25 años solamente en rodeo. El rodeo es parte de mi vida y para mí son sensaciones inigualables".